Entrevista con Beatriz Matesanz: hablemos de Terapia Ocupacional.

Beatriz Matesanz es una profesional de excepción. Diplomada en Magisterio y Terapia Ocupacional, es además Doctora en T.O. También es profesora en nuestro Máster en Autismo, nos encanta tenerla con nosotras en Gatea y nuestros alumnos aprenden muchísimo de ella.

Hoy queremos que vosotros, los suscriptores de AutisMail, aprendáis con ella también. Por eso, hemos preparado una entrevista que os adelantamos es super interesante. Conozcas o no la labor de los Terapeutas Ocupacionales (¡quizás tú mism@ seas T.O.!), te animamos a leerla.

En esta entrevista hablamos de la todavía muy desconocida labor de los Terapeutas Ocupacionales, de anécdotas, de retos del día a día, de autismo… Esperamos que te guste.

 


 

GATEA: ¿Crees que la gente sabe qué es la Terapia Ocupacional? ¿Hace falta más información? 

BEATRIZ: Nada me gustaría más que poder decir que mi profesión, la terapia ocupacional, es ampliamente conocida y valorada en nuestro país, sin embargo, la realidad es muy distinta. A pesar de que en los últimos años se está produciendo un aumento importante del número de terapeutas ocupacionales colegiados y colegiadas, en comparación con el resto de las profesiones sanitarias tenemos la ratio estatal más baja de todas ellas, con tan solo 0,07 terapeutas ocupacionales por cada 1000 habitantes. 

Sí, hace falta insistir en la necesidad de dar mayor visibilidad a esta profesión tan esencial como imprescindible para las personas que han perdido su independencia y/o autonomía, pero estas acciones deberían ir acompañadas de políticas económicas y sociales dirigidas a aumentar la contratación de terapeutas ocupacionales, especialmente en las instituciones sanitarias públicas de nuestro país donde su participación es mínima.

GATEA: ¿Cómo describirías tu labor a alguien que desconoce la T.O.?

BEATRIZ: El rol principal de un terapeuta ocupacional es capacitar a las personas para participar en todas las actividades de la vida diaria que son importantes y significativas en su vida, fomentando así su máxima independencia y /o autonomía.

Los terapeutas ocupacionales estudiamos para ello un grado que nos capacita para trabajar con aquellos grupos de población que manifiestan una privación ocupacional debido a su condición o estado de salud, y, en consecuencia, presentan limitaciones en el desempeño de sus ocupaciones.  

En el ámbito de la infancia y la adolescencia algunas de estas actividades son las que están orientadas a cuidar el cuerpo, como bañarse, ducharse, usar el inodoro, vestirse o comer. Otras son tan necesarias para la salud como el descanso y el sueño, y, por último, se encuentran las actividades relacionadas con el juego, el ocio y las actividades educativas. Muchos niños y adolescentes, ante la presencia de una discapacidad física, intelectual, sensorial o psíquica podrán ver restringida su participación en las ocupaciones mencionadas anteriormente, lo que puede llegar a afectar a su bienestar y calidad de vida. Con el objetivo de evitar estas situaciones es cuando se hace necesaria la derivación a terapia ocupacional.

GATEA: En Gatea, siempre insistimos en la importancia de que los profesionales de todos los sectores entiendan el autismo. ¿Cuáles son las particularidades de trabajar con personas con autismo como T.O.?

BEATRIZ: Cuando un terapeuta ocupacional interviene con niños y adolescentes que presentan esta condición debe tener en cuenta que, para ellos y ellas, manifestar sus necesidades y deseos de participación puede ser un desafío importante. Del mismo modo pueden encontrar dificultades para involucrarse en ciertas actividades de la vida diaria. Por ello es necesario tener en cuenta las siguientes consideraciones:

  • Es importante convertirse en un hábil observador de las respuestas del niño y adolescente, especialmente de aquellas conductas no verbales que se manifestarán a través de una conducta que no siempre será adaptativa. Entender el origen de una conducta es un reto imprescindible cuando trabajamos con personas con autismo.
  • Es necesario además conocer la influencia que las características del entorno tienen en la participación de los niños y adolescentes. Las propiedades sensoriales de dichos entornos, como la iluminación y la acústica pueden producir una sobrecarga sensorial que influirá de manera negativa en la posibilidad de participar.
  • Del mismo modo es esencial conocer las características sensoriales del niño y adolescente para establecer con ellos un contacto apropiado; para un niño defensivo táctil el acercamiento de un profesional que utiliza el tacto profundo y propone actividades de juego con mucho input propioceptivo será mejor recibido que el del profesional que abusa del contacto físico, especialmente superficial, y que le propone actividades relacionadas con el tacto sin haber valorado su umbral de tolerancia.
  • La complejidad de esta condición exige a los profesionales de la terapia ocupacional una formación muy amplia en diferentes modelos de intervención, especialmente en todos aquellos que utilicen el juego y la motivación intrínseca como elementos claves para conseguir la participación de la población infantil.

GATEA: ¿Qué es lo que más te gusta de ser terapeuta ocupacional? ¿Qué te hace disfrutar de tu profesión?

BEATRIZ: De mi trabajo con niños, adolescentes y sus familias me gusta absolutamente todo, es más, me considero muy afortunada al poder ejercer una profesión que me permite contribuir, nada menos que a la promoción de los sentimientos de competencia. Sentirnos competentes para participar en lo que nos motiva e interesa es esencial en la calidad de vida de toda persona.

Respondiendo a la segunda pregunta: lo que más me hace disfrutar sin ningún tipo de duda es involucrarme en el proceso de evaluación en el que a través de la recogida de todos los datos observados en los entornos naturales del niño puedo llegar a entender, por ejemplo, que conductas, como la huida diaria del aula por parte de un niño, pueden están relacionadas con la anticipación del sonido del timbre del recreo, sonido que puede provocar en ciertos niños mucho malestar, ansiedad y estrés.

No puedo dejar de mencionar también la satisfacción que siento cuando las familias y los docentes me hacen partícipe de los progresos. Compartir con una familia ese “muy bien”, que aparece por primera vez en la tarea de caligrafía, observar a un niño que sonríe entusiasmado mientras pincha y cortar un trozo de salchicha o escuchar a los profesores contándome que la niña ha sido capaz de estar sentada diez minutos durante la asamblea, tras haberles sugerido una modificación del asiento, son momentos que me gratifican enormemente.

GATEA: Ser T.O. es, en esencia, encontrar soluciones y vías para superar obstáculos. ¿Cuáles son los retos que te encuentras en el día a día como terapeuta ocupacional?

BEATRIZ: Uno de los retos a los que la mayoría de los terapeutas ocupacionales nos enfrentamos a diario es a la falta de importancia que la población, en general, otorga a la participación de los niños y niñas en las actividades del día a día. Es habitual encontrarnos situaciones en las que niños y adolescentes no son capaces de participar en actividades como la preparación del desayuno y la merienda o de comidas sencillas, en la organización de sus materiales escolares o de su ropa, así como en la colaboración en tareas de limpieza y orden del hogar. 

Por otro lado, es habitual observar, en algunas familias, una cierta tendencia a la sobreprotección que, sin pretenderlo, va anulando la iniciativa de los niños por participar. Es importante tener en cuenta que cada vez que un niño se involucra en una actividad de vestido, aseo, alimentación, etc., está desarrollando, por un lado, habilidades de ideación, planificación y ejecución, por otro lado, está poniendo en juego procesos de atención y memorización de los pasos de la actividad, imprescindibles para su desarrollo cognitivo. La práctica diaria de estas actividades de manera independiente estimula en los niños las sensaciones de competencia necesarias para fomentar su autoestima.

GATEA: Cuéntanos una curiosidad de tu profesión: ¿hay algo que la gente no espere que un T.O. haga? ¿Alguna anécdota que nos puedas compartir?

BEATRIZ: Una de las situaciones que más les sorprende a las familias y docentes es que trabajemos en el entorno escolar. Es habitual que los docentes nos miren con asombro la primera vez que nos acercamos a un aula, ya que desconocen qué podemos aportar. En Estados Unidos los y las terapeutas ocupacionales desarrollan su labor profesional en los centros educativos desde hace más de cuatro décadas y su intervención está respaldada por la Ley IDEA desde el año 1975.Sin embargo, en nuestro país, son muy pocas las comunidades autónomas en las que está establecida oficialmente la presencia del terapeuta ocupacional en las escuelas.

Es importante recordar que la Terapia Ocupacional en el ámbito escolar puede contribuir a mejorar la participación del alumnado con necesidades específicas de apoyo educativo. Algunos de nuestros roles más importantes en este entorno son detectar todo aquello que supone, o que podría suponer, un obstáculo para el desarrollo natural de una actividad escolar. Unas tijeras con excesiva resistencia al movimiento, pinturas que exigen al niño tener demasiada fuerza para poder colorear, una sala de psicomotricidad o un comedor atiborrados de estímulos intensos o aulas en las que no está permitido levantarse de la silla durante la jornada escolar describen situaciones sobre las que el terapeuta ocupacional puede intervenir adaptando tanto los materiales como el entorno físico para facilitar la participación de los niños y niñas.

Me gustaría terminar diciendo que deseo que en el futuro nuestra disciplina encuentre el lugar que le corresponde, ya que la formación que los/as terapeutas ocupacionales poseemos en cuanto a las necesidades sensoriales de niños y adolescentes con autismo, así como la formación adquirida en áreas como la accesibilidad y el diseño universal, hacen de la terapia ocupacional una profesión idónea para generar las oportunidades de participación social que garanticen la inclusión de niños y adolescentes con esta condición.

 


 

Esperamos que hayas disfrutado (y aprendido mucho) de la entrevista con Beatriz. Nos emociona estar rodeadas de profesionales como ella y poder compartir su experiencia con la comunidad.

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Juntos, hacemos mejor el mundo de las personas con autismo y su entorno.

Os mandamos un abrazo enorme,

Equipo Gatea

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